Con la expansión del coronavirus, todos debemos tener precaución con los objetos cotidianos
Hoy en día, prácticamente todo el mundo tiene un teléfono móvil en el bolsillo. Constantemente lo utilizamos para hablar con nuestros seres cercanos, consultar cualquier tipo de información o llamar por teléfono. Lo cogemos, lo guardamos, lo ponemos en diversas superficies, lo pasamos de mano en mano para enseñar la pantalla a otras personas…
Con ese uso, es normal que los smartphones de hoy en día sean un auténtico foco de gérmenes y bacterias. Un reciente estudio de la Universidad de Barcelona apunta que en su superficie se acumulan 30 veces más patógenos de los que hay en una taza de inodoro, por lo que conviene tenerlos limpios, y más en circunstancias como las actuales en las que se deben extremar las precauciones con la irrupción del coronavirus. De hecho, se estima que este permanece más de una semana (hasta unos nueve días) en las superficies más utilizadas en la elaboración de teléfonos móviles, como el cristal, el metal o el plástico.
Limpieza básica
Muchos fabricantes dan instrucciones sobre cómo deben cuidarse sus teléfonos. Apple, sin ir más lejos, aconseja el uso de un paño pequeño, de los que habitualmente se emplean para limpiar lentes de cámaras de fotos, para repasar la pantalla y limpiarla de cualquier tipo de suciedad. Esto puede hacerse en unos instantes todos los días.
Qué productos usar
Si quieres realizar una limpieza un poco más en profundidad que la básica, no es necesario nada extremadamente complejo. Una opción es coger dos paños, uno frotarlo empapado en agua con jabón (con extremado cuidado con todos los botones, ranuras y puertos de tu dispositivo, que no deberán mojarse) y el otro pasarlo inmediatamente después, seco, para dejar el teléfono como nuevo. Si quieres ir un paso más allá puedes utilizar alcohol isopropílico, un líquido específico para la limpieza de productos electrónicos y que no perjudica a su funcionamiento.
Qué productos no usar
El alcohol en su versión más habitual no es aconsejable utilizarlo para limpiar los teléfonos móviles ni otros productos de tecnología, toda vez que destruye una capa que tienen todos los dispositivos con propiedades oleofóbicas, diseñada, entre otros propósitos, para impedir que la pantalla se quede llena de huellas dactilares.
Un paso más allá
Si la suciedad de tu dispositivo es extrema o si quieres llevar las precauciones hasta lo máximo posible, hay un último recurso: un aparato ultravioleta capaz de eliminar todos los microbios y los virus utilizando su radiación. Cada vez se comercializan más, aunque aún no es algo muy generalizado entre los usuarios.
Sigue las normas de higiene
Tal como habrás leído ya en numerosas ocasiones, la principal medida para evitar la propagación de gérmenes y virus es la higiene personal, por lo que, para minimizar la cantidad de patógenos en tu teléfono móvil, es adecuado y deseable lavarse las manos con agua y jabón de forma frecuente o utilizar un gel hidroalcohólico para eliminar potenciales riesgos.